Te espero en las fiestas de mi calendario, en los besos sabios que nadie me dió, en las voces grises que encierra la radio y en la prensa rosa de mi corazón. Presiento que vas a llegar para quedarte pero mientras tanto no puedo olvidarme de lo que puede ser y aún no ha sido, del tiempo que me roba mi destino hasta que se decida a cruzarme contigo...